Chinchillón Anaranjado: El Centinela del Cañadón

18 de noviembre de 2020 | Emanuel Galetto

El chinchillón anaranjado (Lagidium wolffsohni) es un roedor de distribución muy restringida, que ocupa el sector más occidental de la provincia de Santa Cruz y el oriental de las regiones de Aysén y Magallanes, en Chile. Generalmente vive en ambientes rocosos cordilleranos y acantilados o roquedales de cañadones esteparios, alimentándose de las pequeñas plantas que crecen cerca de sus refugios.

Un chinchillón anaranjado se asolea en un roquedal del cañadón del río Pinturas, Parque Patagonia Argentina. Foto: Franco Bucci.

Antes de mi llegada al Parque Patagonia no sabía de la existencia de esta especie y cuando Leandro, mi compañero de trabajo que ya llevaba unos meses en la región, me comentó acerca de la “ardilla” del roquedal, no podía imaginar a qué animal se estaba refiriendo. A los pocos días de instalarme en la región visitamos el imponente Cañadón Pinturas y luego de recorrer varias grietas logramos avistar una familia tomando sol. Su espeso pelaje anaranjado se confundía con las rocas del paredón. Siempre vigilantes, ante cualquier indicio de peligro y tras una corta vocalización, daban pequeños saltos para desaparecer en alguna grieta.

Dentro de los objetivos que nos planteamos en Fundación Rewilding Argentina para esta especie, se incluyen conocer más sobre su ecología y sus hábitos, y revertir las extinciones locales, translocando individuos a los roquedales donde ha desaparecido por acciones antrópicas. Efectivamente, la caza ha hecho desaparecer al chinchillón de varios de los paredones que habitó en el pasado.

Teniendo esto en mente, comenzamos a colocar cámaras trampa en cada grieta o roquedal que encontrábamos. Recorrimos cada rincón del Cañadón Pinturas, de la meseta Sumich, del cerro Chato, escrutando la mayoría de los roquedales que se encuentran dentro de las propiedades de la Fundación. Debíamos aprender todo lo que pudiéramos de esta especie virtualmente desconocida: preferencias del terreno, estructura familiar, horarios de actividad, área de distribución, amenazas, entre muchas otras. Durante más de un año monitoreamos varias familias a través de cámaras trampas y observaciones directas.

«Musa» es una hembra de chinchillón anaranjado a la cual el equipo de Especies en Parque Patagonia colocó con un collar con tecnología VHF, para obtener información sobre sus hábitos y movimientos. Foto: Franco Bucci.

En junio de 2019 iniciamos la segunda etapa del proyecto, capturar diez individuos y equiparlos con un collar VHF. Nunca antes se había capturado un chinchillón anaranjado y menos aún se había utilizado telemetría para estudiar la especie, por lo que se trataba de un desafío importante. El primer paso consistió en que entraran a las trampas Tomahawk (unas especies de jaulas) con las que los capturaríamos sin lastimarlos. Colocamos varias trampas inactivas en las zonas que era más habitual verlos. Tras varias semanas sin tener éxito, comenzamos a agregar cebo para animarlos a entrar. Probamos con todas las frutas conocidas, pero nada parecía atraer la atención de la “ardilla” patagónica. Luego de meses de fracaso tras fracaso y a punto de darnos por vencidos, encontramos su debilidad: alimento balanceado para conejos. Nuestra suerte había cambiado y comenzamos a capturar los primeros individuos.

El 5 de julio de ese año, un equipo conformado por veterinarios, técnicos de campo y biólogos logra capturar el primer individuo, una hembra de 2,5 kilogramos de peso, bautizada Yoana. Sostener el pequeño animal entre las manos fue una experiencia gratificante. Sabíamos que estábamos dando inicio al largo camino para recuperar las poblaciones del chinchillón anaranjado en Patagonia, y aportando información valiosa para el manejo del resto de las especies que integran la familia Chinchillidae.

Finalizado el proceso de colocación de collar VHF, el equipo de Especies en Parque Patagonia devuelve un individuo de chinchillón anaranjado a los paredones rocosos que habita, en el cañadón del río Pinturas. Foto: Franco Bucci.

Ya pasó más de un año desde la primera captura. Colocamos diez collares a diferentes individuos que integran seis familias residentes del Cañadón Pinturas. La información obtenida es invaluable.

Poco a poco vamos exponiendo los secretos de la especie y hoy estamos preparados para la última etapa del proyecto: realizar las primeras translocaciones hacia los paredones de los que nunca debieron desaparecer.

PERFIL DEL AUTOR

Emanuel Galetto

Coordinador de Especies del Parque Patagonia

Emanuel es técnico guardaparque egresado de la Universidad Nacional de Misiones. En el año 2013 comienza se une a la fundación como asistente de campo en Proyecto Iberá. En el año 2014 queda a cargo de la coordinación de los proyectos de reintroducción de osos hormigueros, venados de las pampas, pecaríes de collar y tapires en Rincón del Socorro. En el año 2018 se traslada a la provincia de Santa Cruz para coordinar los proyectos de Especies en el Parque Patagonia, cargo que ocupa actualmente.