CoVid-19 y vida silvestre

4 de mayo de 2020 | Rewilding Argentina

POSICIÓN

Se encuentra ampliamente probado que la transmisión del virus SARS-CoV-2 entre personas es el mecanismo causante de la actual pandemia de CoVid-19. En respuesta a esto, el Poder Ejecutivo Nacional y los poderes ejecutivos provinciales han dispuesto una serie de regulaciones dirigidas a disminuir el contagio entre personas. Correspondientemente, el personal de Rewilding Argentina, tanto el que reside en ciudades como en el campo, se encuentra observando y cumpliendo las disposiciones emanadas por las autoridades, evitando o reduciendo al mínimo el contacto persona a persona.

En relación con el contagio de animales silvestres a personas, no existen evidencias de que suceda. En lo que refiere al contagio de personas a vida silvestre, solo ha ocurrido en contadas ocasiones y siempre en condiciones de cautiverio donde el contacto entre personas y animales es cercano y repetido.

Por lo expuesto, Rewilding Argentina continúa con sus compromisos habituales bajo dos premisas. Que las actividades que realizamos no pongan en riesgo la salud de las personas a través del contagio persona-persona, y tomando todos los recaudos para evitar una improbable trasmisión del virus desde el personal hacia los animales silvestres.

Asimismo, Rewilding Argentina renueva su compromiso con la restauración y conservación de nuestras especies nativas y los ecosistemas que ellas habitan, sin perder de vista que la destrucción y degradación de ambientes naturales representan dos de las principales causas que fomentan la aparición y dispersión de estas pandemias. En este contexto Rewilding Argentina considera de vital importancia que las actividades relacionadas con la investigación y conservación de la vida silvestre y sus hábitats sean fuertemente apoyadas y promovidas.

Gichi, con las precauciones necesarias, continúa atendiendo tareas esenciales del trabajo con la vida silvestre en Proyecto Iberá, Corrientes.

A continuación, se presentan las evidencias en que se basa esta posición, al día 30 de abril de 2020. Esta información puede encontrarse en las detalladas revisiones de la Wildlife Conservation Society (2020), la Organización Colegial Veterinaria Española (2020) y la European Association of Zoo and Wildlife Veterinarians (Lecu et al. 2020). Los principales puntos mencionados por estas organizaciones se resumen a continuación en (A) y (B).

  • (A) ORIGEN
  • El CoVid-19 es una enfermedad viral causada por el SARS-CoV-2. El SARS-CoV-2 pertenece a una familia de virus muy común en mamíferos y aves, que no siempre causan enfermedades.
  • El SARS-CoV-2 entra a las células humanas por medio del Dominio de Unión al Receptor (RBD por sus siglas en inglés) que está adaptado a un receptor celular denominado ACE2.
  • Desde un punto de vista genómico, SARS-CoV-2 es más similar a Bat-CoV-RaTG13, el cual se encuentra en el muricélago Rhinolophus afinis, originario del sudeste asiático. Sin embargo, el RBD de SARS-CoV-2 es diferente del RBD del Bat-CoV-RaTG13. Por lo tanto, SARS-CoV-2 no pudo haber infectado humanos migrando directamente desde Rhinolophus afinis. Esto indica la necesidad de un huésped intermediario que explique la posibilidad de que SARS-CoV-2 se haya originado en Rhinolophus afinis (Lecu et al. 2020 y referencias allí citadas).
  • Los pangolines malayos (Manis javanica) fueron sugeridos como huéspedes intermediarios porque Pangolin-CoV´s RBD es más similar a la región RBD de SARS-CoV-2 que la descripta para Bat-CoV-RaTG13. Sin embargo, el Pangolin-CoV es muy diferente del SAR-CoV-2 (Lecu et al 2020 y referencias allí citadas).

 

Si bien la información científica apunta a un origen animal del virus SARS-CoV-2, permanece todavía desconocida la especie en la cual se originó. Igualmente, se desconoce a la fecha la especie que pudo haber actuado como huésped intermediario.

 

  • (B) CoVid-19 EN ANIMALES DOMÉSTICOS Y SILVESTRES
  • Solo unos pocos casos de animales domésticos con CoVid-19 han sido reportados. Estos casos se dieron en perros, gatos y turones cuyos dueños estaban afectados por la enfermedad. De hecho, más de 5.000 perros, gatos y caballos fueron analizados en 17 países afectados por el CoVid-19. Ninguno de los animales resultó positivo. Un estudio en gatos mostró que solo 15 de 102 animales contrajo el virus en refugios y hospitales para mascotas. De estos 15, el 73% desarrolló anticuerpos. Ninguno de los perros y gatos afectados murió por CoVid-19, mientras sí se reportó la muerte de algunos turones. En general para perros y gatos los síntomas fueron moderados a inexistentes, los animales respondieron generando anticuerpos y las cargas virales disminuyeron a cero en pocos días o semanas (Lecu et al. 2020; Wildlife Conservaton Society 2020).
  • Similarmente, los casos de animales salvajes en cautiverio infectados son escasos. Cinco tigres y tres leones dieron positivo para, o mostraron síntomas de CoVid-19. Todos los animales se recuperaron. Visones americanos en dos granjas con 13,000 y 7,500 animales fueron positivos para CoVid-19; en este caso se informa de la ocurrencia de eventos de mortalidad, pero los números no fueron reportados (Lecu et al. 2020).
  • Modelos dirigidos a evaluar la afinidad del SARS-CoV-2 por el receptor ACE2 en 410 especies de vertebrados predicen que los monos del viejo mundo son el grupo que podría estar más en riesgo de contagiarse de los humanos. Mientras que murciélagos y mustélidos presentarían poco o muy poco riesgo. Los autores enfatizan que sus resultados no deben ser sobre interpretados y que deben ser confirmados por datos experimentales (Damas et al. 2020).

 

El bajísimo número de casos reportados, a pesar de los números masivos de mascotas en el mundo y los miles de animales muestreados, sugieren que los animales domésticos no tienen un rol en la pandemia.

Si bien ocho grandes felinos en cautiverio contrajeron CoVid-19 debido a su contacto cercano con seres humanos infectados, los datos disponibles muestran que los felinos no se contagian fácilmente; y que, en el caso de contagiarse, se recuperan rápido y generan anticuerpos. Por lo tanto, dada la aparente baja susceptibilidad de los felinos al virus, los signos clínicos moderados observados en animales infectados o posiblemente infectados, y la improbabilidad de que el virus afecte poblaciones silvestres, se presume que el CoVid-19 no representa una amenaza para los felinos silvestres (Lecu et al. 2020; Wildlife Conservation Society 2020).

A pesar de la existencia de ~2,500 zoológicos en los Estados Unidos, y ~10,000 en todo el mundo, no existen datos adicionales de animales silvestres en cautiverio positivos para o con síntomas de CoVid-19.

Un técnico observa en forma directa a un ejemplar reproductor de yaguareté en el Centro de Reintroducción de Yaguareté, Parque Iberá, Corrientes.

LO QUE SE ESCONDE DEBAJO

El continuo incremento de los impactos humanos sobre los sistemas naturales, incluyendo la degradación del hábitat y la sobreexplotación de fauna silvestre, son en parte responsables de la emergencia de muchas plagas modernas incluyendo HIV, Ebola, SARS, H5N1 y otras (Corlett et al. 2020). Por ejemplo, la malaria y el dengue están asociados a la deforestación y el cambio climático (Yasuoka and Levins 2007; Colon-Gonzalex et al. 2013) y la dispersión de la meningitis se acentúa durante sequías prolongadas (Molesworth 2003). En general, los grandes impactos negativos que las actividades humanas tienen sobre los ecosistemas resultan en la aparición de nuevas y peligrosas enfermedades (Cazzolla Gatti 2020).

La información científica apunta a la intensa degradación de los sistemas naturales como parcialmente responsable de la aparición de enfermedades emergentes altamente peligrosas para el ser humano.

 

CONCLUSIONES

La evidencia sugiriendo transmisión de CoVid-19 de humanos a animales domésticos y silvestres y viceversa es anecdótica y en el mejor de los casos débil.

Contrariamente, la evidencia muestra abrumadoramente que, salvo en condiciones de gran hacinamiento (ie., granjas de visones), los animales domésticos y silvestres tienen bajísima probabilidad de contagiarse, cuando lo hacen no presentan síntomas y de hacerlo los síntomas son moderados, todos se recuperan (los turones representan una excepción), y luego de recuperados desarrollan anticuerpos. Esto es especialmente cierto para felinos.

De hecho, el análisis objetivo de la información disponible por parte de la Asociación de Veterinarios de Vida Silvestre y Zoológicos Europeos (Lecu et al. 2020), la Organización Colegial Veterinaria Española (2020) y la Wildlife Conservation Society (2020) considera el CoVid-19 como de bajo riesgo para la fauna silvestre y no contempla prohibiciones en la continuidad de trabajos de conservación e investigación. La única excepción la constituyen las poblaciones de murciélagos de especies en peligro de extinción, en cuyo caso se propone extrema precaución durante el desarrollo de los trabajos. La discusión sobre murciélagos continúa ya que el grupo de especialistas de murciélagos de la UICN sugiere la suspensión de los trabajos con estas especies, aunque sin presentar evidencia que apoye esta posición.

La inadecuada comunicación pública realizada sobre la relación entre murciélagos y CoVid-19 está resultando en erradicaciones masivas de murciélagos de acuerdo con un comunicado reciente de la Convención sobre la Conservación de las Especies Migratorias y Acuerdo sobre la Conservación de las Poblaciones de Murciélagos Europeos. Estas erradicaciones replican las sufridas por poblaciones de aves acuáticas migratorias y sus hábitats durante la crisis de la gripe aviar en 2006. Los intentos destinados a prohibir los trabajos de investigación y conservación en fauna silvestre, presentando información de manera incompleta y sesgada, pueden terminar con intentos de erradicación de la misma fauna que se espera proteger.

La evidencia disponible y el cumplimiento de las medidas precautorias para evitar los improbables contagios a la fauna sugieren que las suspensiones de actividades de investigación y conservación no solo son innecesarias, sino que además pueden resultar contraproducentes. En Asia y África, la disminución de guardaparques, turistas e investigadores en el campo producto de la aparición del CoVid-19 ha resultado en un incremento de la caza ilegal de tigres y rinocerontes (https://www.nytimes.com/2020/04/08/science/coronavirus-poaching-rhinos.html; Price 2020).

Por lo tanto creemos que la solución adecuada a pandemias como la provocada por el CoVid-19 es generar acciones proactivas de investigación y conservación, y poner el foco de atención en las verdaderas amenazas que afectan a la fauna silvestre nativa de nuestro país, entre ellas la degradación de ecosistemas debido a la proliferación descontrolada de actividades extractivistas y la continua disminución y pérdida de poblaciones de especies amenazadas.

 

Documentos citados

Cazzolla Gatti R. 2020. Coronavirus outbreak is a symptom of Gaia’s sickness. Ecological Modelling 426 (2020) 109075.

Colón-González F.J., Fezzi C., Lake I.R., Hunter P.R. 2003. The effects of weather and climate change on dengue. PLoS Neglected Tropical Diseases 7(11):e2503.

Corlett R.T., Primack R.B., Devictor V., et al. 2020. Impacts of the coronavirus pandemic on biodiversity conservation, Biological Conservation. https://doi.org/10.1016/j.biocon.2020.108571

Damas J. et al. 2020. Broad Host Range of SARS-CoV-2 Predicted by Comparative and Structural Analysis of ACE2 in Vertebrates. Genomics.

Hahn B.H., Shaw G.M., De K.M., Sharp P.M. 2000. AIDS as a zoonosis: scientific and public health implications. Science 287(5453):607–614.

Lecu, A., Bertelsen, M. and Walzer, C. 2020. Science-based facts & knowledge about wild animals, zoos and Sars-cov-2 virus. EAZWV Infectious Diseases Working Group. Report, 6th Edition, 10 pp.

Molesworth A.M. 2003. Environmental risk and meningitis epidemics in Africa. Emerging Infectious Diseases 9(10):1287.

Organización Colegial Veterinaria Española. 2020. Coronavirus covid-19 y animales. Actualización a 7/4/2020. Informe 2 pp.

Price, K. 2020. Poaching, deforestation reportedly on the rise since COVID-19 lockdowns. https://www.conservation.org/blog/poaching-deforestation-reportedly-on-the-rise-since-covid-19-lockdowns?utm_campaign=General&utm_medium=social&utm_source=facebook&s_src=facebook&s_subsrc=General_2020May02&fbclid=IwAR3OXzIwVW1fHfJ0H99fqVfYEXBdoV7Z89rXG3bngPUxILS9nfRlJQEalyM

Wildife Conservation Society. 2020. WCS Fact Sheet: BIG CATS, SARS-COV-2 AND COVID-19. Report, 2 pp.

Yasuoka J., Levins R.  2007. Impact of deforestation and agricultural development on anopheline ecology and malaria epidemiology. The American Journal of Tropical Medicine and Hygiene 76(3):450–460.

PERFIL DEL AUTOR

Fundación Rewilding Argentina

Trabajamos para revertir la crisis de extinción de especies.